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Argentina se despidió con una alegría

Argentina se despidió con una alegría FIVB

La Selección argentina de vóley femenino derrotó a Camerún por 3-0 y se despidió del Mundial en Japón con una victoria.

En su segundo Campeonato Mundial consecutivo el plantel dirigido por Guillermo Orduna pudo finalizar su participación con una victoria ante su par camerunés por 25-22, 25-20, y 25-12. Las máximas anotadoras del partido fueron Julieta Lazcano y Elina Rodríguez con 14 y 13 puntos, respectivamente.

El debut fue ante el anfitrión, Japón. Las argentinas no tuvieron chances ante la velocidad y potencia del juego de las asiáticas. La derrota fue contundente 3-0 (15-25, 13-25, 12-25). Además de la derrota, Tatiana Rizzo y Clarisa Sagardía chocaron violentamente y las dejaron sin Mundial, ya que ambas presentaban fracturas, la líbero en el pómulo y la armadora en la nariz. Con el correr de los partidos estas lesiones se hicieron una pérdida muy importante para el equipo.

Algo diezmadas, pero con la fe intacta, enfrentaron a México en el segundo partido, pero el resultado fue el mismo que ante Japón. Si bien, fue más luchado y parejo, a las argentinas les faltó esa puntada final para, al menos, llevarse un set; el encuentro terminó 20-25, 23-25, 23-25. La figura argentina volvió a ser Julieta Lazcano con diez puntos.

Ante Alemania la historia volvía a ser la misma, Argentina generó un muro de bloqueos y dio pelea, pero se topó con la opuesta alemana, Louis Lippman, que anotó 23 puntos a lo largo del partido y se tornó imparable durante todo el encuentro. A pesar de un segundo set muy luchado, el final del partido quedó para las europeas, 21-25, 32-34, 18-25. Lucía Fresco fue la máxima anotadora para Argentina con 15 tantos.

Orduna y todo el plantel sabía que había que ganar dos partidos para intentar meterse en la segunda ronda. Holanda debía ser la hazaña que estaban esperando y que todo el equipo quería obtener. Dejaron todo pero, a veces, no basta con garra y con voluntad. Holanda tuvo la técnica, la habilidad y la eficacia que Argentina nunca encontró a lo largo del Mundial y ganó con autoridad. El resultado fue 17-25, 17-25, 22-25 para sellar el boleto de regreso hacia Buenos Aires.


Por Marco Camparone

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