Entrevistas

La reinvención del fútbol playa en Argentina

La reinvención del fútbol playa en Argentina

La Selección nacional de Fútbol Playa emprendió una gira hacia Perú para comenzar un año en el que buscará volver a clasificar al Mundial tras su ausencia en 2017.

Luego de quedar afuera del Campeonato Mundial de Fútbol Playa de 2017, celebrado en Bahamas, la Selección argentina se encontró en su peor momento. Tras ocho ediciones de clasificación consecutiva, la derrota por penales en el partido por el tercer puesto ante Ecuador la dejó fuera de la máxima competencia internacional por primera vez en su historia.

La nueva gestión de la AFA decidió en marzo de aquel año crear la Comisión de Futsal y Fútbol Playa y a inicios de 2018 Hernán Magrini, ex jugador de la Selección entre 2006 y 2008 y ayudante de campo desde entonces durante la conducción de Francisco Petrasso -hasta 2013- y Gustavo Casado, asumió el cargo de entrenador.

Desde su designación como entrenador de la Selección, Magrini le planteó a la AFA la necesidad de disputar entre 15 y 20 partidos durante el año. Antes de su llegada, la actividad del combinado nacional era limitada a la competencia oficial. “No sabías cómo estabas contra un europeo o un sudamericano. Tener más competencia hoy en día te da más rodaje”, dice.

Enfrenta el desafío de volver a posicionar a Argentina dentro de los tres mejores países de la región y participar nuevamente del Mundial con un equipo netamente amateur. Los jugadores se reúnen lunes a viernes de 10 a 12hs en el predio de Ezeiza, y una vez concluido el entrenamiento emprenden su camino al trabajo.

Además, este año se realizará por primera vez una liga organizada por la AFA, que contará con ocho equipos e iniciará el primer fin de semana de febrero. “Tener cada vez más competencia te lleva a tener más jugadores activos”, destaca Magrini, quien observa como fundamental su creación para el crecimiento del deporte en el país.

La Selección jugará en Lima tres partidos frente al combinado local entre el 25 y el 27 de enero. “Perú vino acá hace poquito con mayores y sub 20. Jugamos seis partidos. Es una buena medida”, recuerda. La preparación gira en torno a la eliminatoria para el Mundial, que se celebrará en Brasil (en principio, del 17 al 24 de febrero, aunque la Federación brasileña presentó un pedido para jugarla en abril).

¿Cuánto cambió el deporte desde que jugabas hasta ahora?
Mucho. Antes era un poco menos físico y hoy un equipo te gana corriendo o con pelota parada. Cambió el entrenamiento, la difusión, la importancia en Europa, donde hay jugadores que viven de esto. Al agregarle más técnica se hizo menos llamativo y más táctico. Algunos equipos te ponen rombo, otros 2 y 2. Hay dos millones de variantes. Se fue liberando para que el jugador en ataque tenga más libertades en convertir. Antes lo jugaban ciertos países y ahora hay un montón de países asiáticos y europeos que lo juegan. En Sudamérica tenés equipos como Paraguay que es una potencia, 7mo del mundo porque tiene una liga muy fuerte.

¿A nivel institucional qué diferencia de prioridades tiene la AFA?
Pensá que el deporte se agregó por una bajada de línea de FIFA. Brasil, Uruguay y Paraguay lo tenían. En su momento quizás era molesto tener una cancha de arena en un predio de campo. Era más que nada lo obligatorio y teníamos la competencia de eliminatorias, Mundial y nada más. Veníamos a entrenar pero menos que ahora. Hoy en día la AFA está más metida en el día a día con nosotros, los entrenadores, la infraestructura misma, los materiales, la ropa, en conseguir lo que nos hacía tanta falta, que son los amistosos. Estamos más apoyados.

¿Qué diferencia tiene el equipo de hace un año con el de ahora?
Desde el juego, mucha. Yo veía que era todo muy monótono y necesitábamos un cambio. Implemento variedad en ataque, rotar, jugar espacios rápidos. Que el último hombre sea pivot en la misma jugada, que el ala termine de último. En ese sentido fue un cambio grande que se hizo. A los 20 días que lo agarré ya jugábamos así. Lo charlé y fue bueno.

¿Hacia donde mirás para aprender y aplicar conocimientos nuevos?
Aprendés con todo. Cuando agarramos, nuestro objetivo fue saber que teníamos dos equipos por delante nuestro. Brasil, inalcanzable, pero con la idea de achicar la brecha, que podamos jugar siendo competitivos. Y Paraguay, con quienes se achicó demasiado la brecha. Hemos jugado en agosto y hemos ganado dos. En el sudamericano en Bolivia perdimos 7-6 y lo perdimos por detalles de pelota parada. En el juego no hubo diferencias.

¿Esa diferencia con Paraguay tiene que ver con que allá se tomaron más en serio la obligatoriedad que impuso la FIFA?
Si, totalmente. Al comienzo era un rival ganable, accesible. Pero armaron una liga muy fuerte, con Cerro Porteño, Olimpia, Libertad, con un apoyo de la federación, hay jugadores pagos. Llevaron un técnico de Brasil, Guga, que es una eminencia del deporte y levantaron demasiado. Hoy en día está un paso arriba, si.

¿Fue positivo para el deporte quedar afuera del último mundial y así ser tomado en serio?
Cuando perdés no es bueno. Pero fue positivo en el sentido de que fue un cachetazo. Veníamos clasificando siempre terceros, por la ventana. Me han dicho de otras federaciones: “lo mejor que le puede pasar a ustedes es quedar afuera de un Mundial para darse cuenta de lo que tienen que cambiar como para que no eso no pase”. En ese sentido fue un golpe para empezar de vuelta. La AFA tomó conocimiento de eso, se metió en la liga. Puede haber sido un punto no jugar un Mundial, fue fuerte.

Hace dos años hubo dos ligas que fueron cortas, pero ahora la AFA se involucra.
Si, fueron cortas. Hay una liga también en Escobar con mucha gente reunida y muchos de los chicos de selección están ahí. Ahora es más a nivel clubes. Un caso como Racing, que se va a sumar. Huracán ya está instalado, como Rosario Central. La idea es poder formarlo al menos con 8 ó 10 equipos, lanzarlo con la perspectiva de que el día de mañana se puedan sumar más equipos de AFA.

¿Cómo anticipás las eliminatorias?
Va ser una eliminatoria que tenés a Paraguay clasificado como anfitrión, a Brasil casi seguro por potencia y local, y vas a pelear un puesto con 8 equipos. Va a ser dura, pero hay que jugar. El objetivo es estar a la altura de todos.

No se sabe la fecha de eliminatoria aún, y podrían jugarse antes los Juegos Sudamericanos de Playa, en Rosario. ¿Sería positivo?
Yo creo que sí. Porque son dos competencias con los mismos países pero muy distintas. La eliminatoria es muy formal, muy fuerte, te da un pasaje al Mundial y eso puede ser un empujón grande para los Odesur, o al revés: el no pasaje te hace jugar los Odesur caído. Es relativo. Los Odesur tienen un abanico más grande, como una prueba de jugadores a llevar a eliminatorias si se cambia la fecha. En parte el cambio es bueno.

En la liga sudamericana estuviste con el sub 20 y tuvieron un buen resultado, en el segundo lugar. ¿Los vas incorporando a la mayor?
Es una categoría que juega una vez por año, en ese torneo. Me pareció que había buen material para seguir trabajando, no dejarlo entero acá porque serían muchos jugadores, pero voy llamando de a dos. Que entrenen dos o tres veces por semana. La idea fue juntarlos para que todos participen en un equipo, que va a ser Racing. Para que esos pibes puedan tener una competencia durante el año y sigan jugando juntos. Mientras tanto lo que hago es mechar jugadores.


Por Yannick Zaputovich

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